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La cara Salvaje de Los Andes Chilenos

Senderismo, cabalgatas, turismo invernal y ciclismo de montaña en Maule

Si usted desea excursionar por Maule, hágase inmediatamente la idea que no contará con el cúmulo de comodidades que ya son estándares en Europa o Norteamérica. Olvídese de esos señalizados caminos que lo llevan justo a los pies de la montaña, de aquellos provistos kioscos que venden refrescos en los miradores o de cálidas cabañas esperando a los mochileros al final de cada jornada. A cambio de esas comodidades, usted encontrará aquí algo que no experimentará ni en el sobrepoblado Himalaya, ni en los refinados Alpes, ni siquiera en las relativamente cercanas Torres del Paine:

El saber que aquí parte de la senda la hace usted. Porque aquí el camino muchas veces se hace invisible y pocas veces está señalizado.

Porque aquí los senderos no están hechos para el turismo, sino que por siglos lo han ido haciendo campesinos, arrieros y comerciantes con sus huellas.

Senderismo, Montañismo, Escalada

Así Son los senderos de Maule, la cara Salvaje de Los Andes chilenos. Donde repetidamente sentirá estar donde nunca nadie había estado antes. Los Senderos Huasos, como se llama la red de senderos del Maule – parte de los cuales presentamos a continuación-, conectan pérdidas cumbres y valles cordilleranos con varias reservas naturales y pueden ser recorridos en uno o varios días. Buena parte de los recorridos son aptos para cualquier persona, aunque se recomienda hacerse acompañar por guías locales ya que es muy fácil perderse, y pueden hacerse a pie, en bicicleta o a caballo. Hay sectores eso sí sólo para montañistas y escaladores con cierta preparación.

Senderos imperdibles del Maule

  • Dunas de Putú 1 día
  • Parque Natural Tricahue 1 día
  • Valle Río del Puente 1 día
  • Enladrillado Trail 2 días
  • Valle Achibueno 3 días
  • Circuito los Cóndores 5-8 días

En las zonas rurales de Maule el Caballo todavía es un medio de transporte vigente. Hasta en algunas urbes importantes de la región no será extraño que encuentre gente montando a caballo como sí de un auténtico western austral se tratara. Para el viajero puede ser una alternativa práctica, económica y fácil de encontrar: hay muchas personas que los poseen, trabajan sobre ellos y, a menudo, los arriendan. Es más, al poco tiempo se dará cuenta que prácticamente cualquier huaso o arriero que encuentre en su camino estará dispuesto a organizar una cabalgata a las montañas con albergue y comida incluida, a cambio de una remuneración igualmente sencilla. Los Caballos suelen ser pequeños y corpulentos. Podrá subirse a ellos con toda seguridad, incluso sí es usted principiante. Lo que sí es importante es ser acompañado por un guía. En Los Andes maulinos incluso jinetes experimentados podrían tener problemas sin alguien que conozca el camino y los límites de esfuerzo que puede alcanzar el animal.